5 de febrero de 2012

Capítulo 44: Bajo el mar


SHINOM HURRICANE


* Shinom camina con la mirada perdida en el horizonte. Izanagui da un paso y le dice *

- Shinom espera... - * Shinom se detiene y se gira. Le observa casi que con desprecio. * - Tengo algo que decirte... y que darte... -

* Shinom frunce el seño *

****


* Mimi continúa un tanto rezagada del grupo. Mira hacia abajo con algo de tristeza, pensativa. Orihime, Eagle y Aubrey hablan con entusiasmo mientras Sergei, Diego y Kazusa los observan con una sonrisa en la boca. *

- Jijiji, sí Eagle es igual de tonto, ji ji - * Le dice Aubrey con una sonrisa burlona a Orihime *

- ¡Oye! - * Se queja Eagle. *

- Creo que él y Shinom se llevarían muy bien, ¿tú no? - * Le pregunta Aubrey *

- ¡Seguro jejeje! Sería muy gracioso verlos juntos - * Le responde ella. De golpe se da cuenta de que Sergei no había hablado * - Oye... ¿por qué no hablas?

- Es que es mudo - * Dice Aubrey con una sonrisa. Todos se quedan con la boca abierta. *

- ¡¡¿Lo podrías haber dicho antes?!! - * Dicen Kazusa, Diego y Orihime *

- ¡¿Qué es mudo?!! - * Le pregunta Eagle *

- ¡¡¡¡¡¡¡No lo sabía!!!!!!!! - * Vuelven a gritar estos tres al unísono *

- Es que lo arrastré porque era el único que parecía no quejarse... - * Piensa en voz alta mientras se ve como se lo lleva a rastra y Sergei se deja llevar con cara de no entender nada. *

- Bueno acamparemos por aquí... - * Dice Kazusa al ver un descampado * - Dentro de dos días llegaremos a la villa... Por cierto Orihime, tu familia siempre fue bien recibida en esa villa, la actual líder fue una muy buena amiga de tu madre. - * Le dice Kazusa contenta *

- ¿De verdad? - * Pregunta ella ilusionada. *

****


- Parece ser que al fin ha caído abatido - * Se oye la voz de Nobu. Nova está tirado en el suelo, inconsciente. *

* Se encuentran en el medio de la jungla. Sigue lloviendo. Nobu y Ryo están espalda con espalda mirando al alrededor. *

- Justo en el momento adecuado - * Le dice Ryo a su compañero con una sonrisa. * - Ahora ten enseñaré por qué soy tu superior... -

- ¿Cuántos son? - * Le pregunta Nobu, al rededor de ellos hay varias siluetas de muchas personas. *

- Más de 40, 43 para ser exactos. - * Le responde Ryo * - Son todas mujeres... pero... Hay algo extraño en ellas... - 

- ¿Merrows? Ya veo, así que hemos tenido la mala suerte de caer en una de sus islas... -

- Nobu, conoces mi debilidad... tú que eres el insensible acaba con ellas... - * Le dice Ryo con cara de angustiado. *

- Espera... - * Dice Nobu extendiendo el brazo y la mano al ver que una de ellas se acerca. *

* De la oscuridad aparece una hermosa mujer. Con apariencia débil, el cabello de color de oro, ojos verdes, la piel pálida y terciopelada, vestida con unas prendas claras, casi transparentes, de varios colores. Su encanto y belleza son admirables, pero también lleva consigo una extraña lanza. Las prendas son del estilo árabe, pero más claras y transparentes, como la seda, pero no lo suficiente como para que se les vea el cuerpo desnudo. *

- ¡Dios, está muy buena! - * Dice Ryo sorprendido *

- Céntratee - * Le dice Nobu cansado de la actitud de su compañero. *

- La diosa Poseidón requiere de vuestra presencia - * Se dirige hacia ellos un tanto molesta *

Capítulo 44: Bajo el mar

* Nova despierta en una cómoda cama. Las sábanas que lo cubren son del mismo material que el de las sirenas. Se encuentra en una celda. Los barrotes parecen estar hecho de bambú, la celda parece haber sido cavada y no construida, ya que todo está hecho de tierra. De hecho hay algunos corales y plantas luminosas que surgen de lugares aleatorios de la habitación. Fuera de la celda solo hay un pasillo. Delante de la cama está Ryo y Nobu, el primero sentado y el segundo parado. Los dos se alegran al ver que se levantan, Nobu lo hace a su manera. *

- Buenos días bella durmiente... - * Le dice Ryo sonriente *

- ¿Dónde estamos? - * Pregunta Nova un tanto aturdido * - Me siento muy descansado... -

- ¡Ya ha despertado! - * Anuncia Nobu hacia el pasillo *

- Estamos en la capital del reino de las Merrows. Atlántida. - * Le dice Ryo sonriendo como un niño pequeño mientras se hamaca de alegría. *

- ¿Atlántida? - * Pregunta aún un poco aturdido * - ¿Eso no era un mito? -

- No, el primer avatar del agua, Poseidón, cooperó con el de tierra para poder hundir una ciudad durante la guerra. Les cedió esa tierra a las Merrows, o sirenas, para que tuvieran un lugar en donde refugiarse de los humanos. - * Le comenta la historia Ryo igual de ilusionado. * - O eso cuenta la leyenda... -

- ¿Sirenas? ¿estamos en la ciudad de las sirenas? - * Se pregunta Nova un tanto extrañado. *

- No te preocupes a nosotros tampoco nos hace mucha gracias tenerlos aquí - * Dice la voz de una mujer. *

* Del otro lado se encuentra la misma mujer que apareció en la jungla. La acompañan dos mujeres iguales pero de la misma belleza. La principal diferencia que hay, a parte del aspecto, es que la de cabellos dorados tiene un trozo de esa tela atada al brazo izquierdo, de color rojo. *

- ¿Por qué estamos aquí? - * Pregunta Nova confundido *

- Nuestra reina y diosa, Poseidón-sama, ha requerido tu presencia. Ahora mismo os espera en la corte. - * Le informa ella mientras abre la celda * - Rápido, si intentan algo les mataremos.

- Siempre creí que Poseidón era hombre... - * Le susurra Nova a Ryo mientras van de camino a la corte. *

- Bueno yo eso no lo... 

- El primer avatar del agua, el gran Poseidón-sama, nos bendijo con este lugar para ocultarnos de los asquerosos humanos y Tenshis... - * Responde ella de forma severa * "Veo que nos tienen rencor por algo" * Piensa Nova * - El tubo muna hija, la cual heredó el reinado de esta tierra. Poseidón-sama estaba casado con la más bella de las sirenas, su hija, Neptuno, heredó el título de Poseidón, ya que fue el mismo pueblo quién se lo dio. Desde entonces los descendientes puro del linaje del nuestro señor han sido llamado por el título de Poseidón. Es lo que humanos entienden por rey... -

* Mientras le explicaba iban caminando por varios pasillos. La capital estaba situada encima de un enorme arrecife de corales. La ciudad estaba abajo de ellos, mientras que la corte y el palacio se situaban en el coral más alto, de varios colores. Además, estaba lleno de pequeñas plantas subacuáticas fotolumínicas, lo que le da cierto aire de elegancia. Durante todo el recorrido, una burbuja los acompañaba. *

- Hemos llegado - * Anuncia al pararse delante de una enorme puerta *

* Las puertas se abren y dentro hay una enorme habitación muy bien iluminada. En una concha gigantesca están sentados los jueces y al lado hay un motón de sirenas sentadas en una especia de tribuna. El pasillo es un hueco dentro de esas tribunas, que rodean la sala, que es circular, de forma que los acusados cuando tengan que ser juzgados se encuentren rodeados completamente por una un enorme público, tan inmenso como en un anfiteatro enorme. El techo tiene forma de cúpula, todo natural, y la iluminación proviene del interior de unas conchas que están adheridas a la pared, como muchas lámparas actuales. *

- ¡Wooo! ¡¡Sugooooi!! - * Dice Ryo encantado * - Si hasta tiene perlas luminosas... sabía que esta ciudad no era un mito... - * Dice llorando. *

- Por seguridad se desconoce el paradero de esta ciudad, además, no responde ante nuestros Reyes y los diez comandantes supremos. - * Le explica Nobu *

* Llegan al centro del círculo y la mujeres/sirena, que los acompañaba, que siempre ha tenido dos pies, a diferencia de las sirenas que están en el agua, se acerca a su reina y se arrodilla. *

- He cumplido con sus ordenes, Poseidón-sama - * Dice la mujer sonrojada. *

- Rubí, no eran órdenes, solo una gentil petición... - * Suena una dulce y seductora voz * - Gracias...

- H-hai - * La mujer se vuelve completamente roja y un tanto nerviosa *

* La reina tiene el cabello largo, más que su cuerpo, tiene cola, como todas las sirenas, pero de color oro. Lleva el mismo tipo de ropa, solo que ésta brilla por sí misma y con una estética más elegante. Está sentada en un trono, su cabello es de color celeste, su cuerpo parece débil, su voz es tierna, dulce y sensual, su rostro bellísimo y compasivo. *

- Disculpen las molestias, pero las merrows odiamos a los humanos, sobre todo a los hombres. - * Dice ella con el mismo tono * - Muy bien... que comience el juicio...

¿DE QUÉ SE LES ACUSA?


Próximo Capítulo 45: La canción del mañana
Continuará…

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